Calendario de vacunación más común

  • la primera vacunacion es a la edad aproximada de: 2-3 meses): trivalente felina
  • 3 o 4 semanas después de la primera vacuna: refuerzo de la trivalente felina
  • No siempre obligatoria, antes del año: rabia y leucemia (dos dosis con intervalos)
  • Al cumplir 1 año: refuerzo de la trivalente felina y, si procede, refuerzo de leucemia y rabia
  • Es aconsejable en gatos adultos hacer test de leucemia y FIV antes de vacunar.
  • Si bien muchos veterinarios aconsejan repetir la revacunación cada año, varios estudios recientes demuestran que en la mayoría de los casos el efecto de la vacuna dura unos 3 años.

 

                   

Vacunas prioritarias

Panleucopenia felina

El virus de la panleucopenia causa una enfermedad grave y a menudo mortal. La vacunación es muy efectiva y por fortuna ha contribuido a reducir sustancialmente la incidencia entre los gatos. Sin embargo, cuando las poblaciones de gatos son susceptibles, es una enfermedad altamente infecciosa. Además, el virus puede sobrevivir en el ambiente. Los gatos también puede infectarse con cepas de parvovirus canino.

Herpesvirus felino

Una vez que un gato se infecta con un Herpesvirus felino, padecerá signos de gripe felina por un breve periodo de tiempo. Aunque los signos clínicos desaparezcan, el virus permanece latente en el interior del organismo provocando episodios recurrentes de afección respiratoria y/o problemas oculares. El estrés puede inducir a uno de estos episodios. La infección suele producirse por el contacto muy estrecho con otros gatos, ya que el virus muere en el ambiente. La vacunación disminuye el riesgo de transmisión de gato a gato (ej. exposiciones felinas, residencias felinas ó clínicas veterinarias) y se cree que reduce los episodios de enfermedad clínica en gatos infectados de forma crónica. Para más información sobre herpesvirus, clic aquí.

Calicivirus felino

Al igual que el Herpesvirus, el Calicivirus felino causa gripe, a menudo acompañado de úlceras orales. O conseguimos que los gatos eliminen la enfermedad o esta se hará crónica. Existen muchas cepas diferentes de calicivirus, y las vacunas están elaboradas para proteger frente a las cepas más patógenas. La presencia de tantas cepas diferentes y la capacidad de los gatos de padecer la infección de forma crónica (posiblemente cuando son jóvenes y se infectan antes de ser vacunados) explicaría por qué algunos gatos muestran síntomas de enfermedad incluso después de haber sido vacunados. Sin embargo, como en el caso del herpesvirus, la vacunación se sigue recomendando para reducir la frecuencia y severidad de los signos clínicos. Para más información sobre calicivirus, clic aquí.

Vacunas optativas

Virus de la Leucemia felina (FeLV)

FeLV se propaga por la saliva. Los gatos sufren la infección a través del acicalamiento mutuo, compartir los comederos y bebederos o por mordiscos de gatos infectados. Además, los cachorros pueden infectarse por vía placentaria y el virus puede también transmitirse en las montas. Los gatos que más riesgo sufren de contraer esta enfermedad son aquellos que viven en casas de mucho individuos y los que tienen hábitos de vida en semilibertad. Un gato que vive solo en casa, por tanto, no padece riesgos de ser infectado. Los test en sangre para detectar antígeno de FeLV son útiles para la identificación del estatus de los gatos en una casa, y así facilitar la decisión sobre si vacunar o no frente a leucemia felina. Para más información sobre FeLV, clic aquí.

Chlamydophila felis

La infección por la bacteria Chlamydophila felis provoca conjuntivitis y enfermedad de vías respiratorias altas. Los cachorros son más susceptibles, sobre todo a la edad a la cual todavía no pueden ser vacunados. La mayoría de los casos se pueden manejar bien con antibióticos apropiados antes que con la vacunación, aunque ésta podría ser útil en casas donde hay muchos gatos y la enfermedad es endémica. Para más información sobre Chlamydophila felis, clic aquí

Bordetella bronchiseptica

La infección por la bacteria Bordetella bronchiseptica puede producir síntomas de enfermedad respiratoria como tos o neumonía. Es uno de los gérmenes que pueden provocar la tos de las perreras en el perro. Los gatos que padecen más riesgo son los que viven en casas con muchos gatos o gatos que comparten habitat con perros. Los gatos en riesgo deben vacunarse de forma rutinaria y también puede ser una buena estrategia vacunar al gato antes de llevarle a una residencia, en especial si allí convivirá con perros. Esta vacuna se instila dentro de la nariz en lugar de inocularse, y confiere una inmunidad local en las vías respiratorias. Para más información sobre Bordetella bronchiseptica, clic aquí.

Fuente:http://www.avepa.org (This information sheet is produced by International Cat Care )